lunes, 31 de diciembre de 2012

Atrevámosnos con un año por estrenar

     A quienes os paseáis por este blog de vez en cuando,
         a quienes entrásteis por despiste,
a los que os gusta visitarlo,
                           a tod:)s           
os deseamos
                    

                 Energía, Alegría
y Serenidad

         para luchar por todo aquello que merece la pena en nuestras vidas,
     por todo aquello que nos hace cómplices, compinches y solidarios en la lucha ante tanto sufrimiento social. 

(Ilustraciones de Candela Poó)

martes, 4 de diciembre de 2012

El Nuevo Testamento según Tía Blasina

   -¡Titaaa!, ¡Tía Blasina, ¿dónde estás?!
   -¡En el fondo del mar, matarile!
   -¿Qué haces en la cocina leyendo?
   -Ahorrar, Martina, mientras que tengo el puchero al fuego se está calentita aquí y no tengo que encender el radiador en la salita. Hay que llegar a fin de paga.
   -¿Qué lees?
   -Benedetti, mira qué parrafito más alentador:
"Una vez, hace muchos años, le oí decir al más viejo de ellos: 'El gran error de algunos hombres de comercio es tratar a sus empleados como si fueran seres humanos'. Nunca me olvidé ni me olvidaré de esa fracesita, sencillamente porque no la puedo perdonar. No sólo en mi nombre, sino en nombre de todo el género humano." Después el personaje tiene un rasgo de perdón, es que ya ha madurado y aunque les llama "Asquerosos y huecos" dice de ellos que padecen "la soledad del que ni siquiera se tiene a sí mismo".
   -Muestra compasión.
   -¡Y una leche, Martina, al enemigo ni agua! Que se vayan a buscarse a sí mismos y nos dejen a los demás en paz, que bastante daño han hecho ya esos bastardos de banqueros, politicastros y chupasangres!
   -¿Eso que tienes en el frutero es una Biblia, tita? Qué bonita, una Biblia ilustrada...
    -Sí, mira, esta es mi ilustración favorita
La expulsión de los mercaderes del Templo            El Greco
Y mira, ven, esta la quiero plastificar para ponerla en la puerta del bloque, ya he hablado con el presidente de la Comunidad
 
La expulsión de los mercaderes del Templo         G. Tiepolo
Me han comentado que el vecino del segundo, ese muchachito tan mono que toca la guitarra tan bien, que trabajaba en la Escuela Municipal de Música...
   -¡Ah, ya! ¿Trabajaba? Es que...
   -Sí, Martina, y como no encuentre nada pronto, la hipoteca la va a tener que pagar con su cuerpo. Así que es menester que los vecinos nos vayamos concienciando desde ya para defender a nuestro muchachito del segundo, por si vienen a buscarlo para tapiarle su casa.
   -Trae para acá que mientras tu puchero se hace, me llego a la papelería y te lo plastifico. Por cierto, tita, ¿no notas que echa un cierto olor... no sé, como a podrido, nauseabundo... ¿Qué carne le has echado?
    -Los cojones de Rajoy, los morros de Botín, la jeta de Rato..., pero no te apures, es para la comida del perro de la del cuarto A, que se lleva todas las noches ladrando hasta las tantonas.
    -Envenenar animales no está bien, tía Blasina.
    -Si yo los estoy hirviendo, hija...

viernes, 2 de noviembre de 2012

Valle-Inclán resucita en mi barrio



Acabo de volver del supermercado. Un supermercado modesto de mi barrio donde compro los desavíos. Son las seis de la tarde, está completamente vacío.

    Aprovecho para cambiar unas palabras con la cajera, una joven morena, lozana y sonriente, con quien rara vez hablo porque con frecuencia empuja la bulla de la cola.
   -Esto está hoy muy tranquilo...
   -Porque es temprano, pero ya cerca del cierre no veas la cola que se forma, todo el mundo viene a la misma hora.
   -¿Y eso? Esta hora parece más grata para comprar, más tarde entre la noche y el frío...
   -Es que se nota que ya la gente sale menos a los bares, compra cualquier cosa y se la toma en casa, nosotros lo notamos mucho, nos viene bien, pero a esos...- y me señala los bares de enfrente.
   Seguimos charlando y me cuenta que es pianista, que está aquí porque hay que pagar la hipoteca, porque su marido, que es ingeniero, está parado: No hace más que echar currículos por todo el mundo, como le salga algo, allí nos vamos, dice.
   Hará un par de años que la veo ante la caja. Siempre me ha admirado su habilidad y velocidad marcando precios y códigos. Ahora sé por qué.
   Vivo en un puto país de lujo que se permite tener cajeras de supermercado pianistas y políticos y banqueros ladrones.
              
      (Dedicado a mi cajera del súper, con quien he echado un ratito esta tarde)

domingo, 28 de octubre de 2012

Respira el 14 de noviembre ¡y todos los días!

Tía Blasina y Martina han recibido por correo este vídeo y desean compartirlo con todxs los visitantes de este blog.
Ya lo sabéis, un abrazo.


http://www.youtube.com/watch?v=8Y-H_KssDdk&feature=player_detailpage


Da la casualidad que hoy la tita también ha encontrado esta foto de mayo de 2011, eran las diez de la noche y estábamos en una asamblea del 15-M en Las Setas de Sevilla:


El 14 de noviembre hagamos cada uno lo que podamos, pero no nos olvidemos de decir nuestra palabra con los otros, no dejemos que la palabra solidaridad nos la conviertan en un pingajo.

domingo, 21 de octubre de 2012

Pintoras impresionistas en una tarde gris de domingo

Muestunde               Marie Bracquemond
       Tras una cortina de finos hilos verdes, luce una tarde de plomo luminoso orlado de azoteas y ropa tendida.

Servicio de lavandería                           Berthe Morisot
              Un horizonte pardo tras las perlitas de lluvia que alegran mi tarde, árboles a punto de silenciar su vida para dormir como viejos osos: recuerdo el bienestar del silencio perdido.

Paisaje invernal                         Marie Bracquemond
                  Cuando abra los ojos, veré una semana más, y esta hermosa y vacía tarde de domingo solo será el anticipo de la noche, de cada día, hasta que lleguen los días. Solo entonces seré mi día, la gotita en mi cristal tras una cortinilla de finos hilos verdes. 

Despertar de Mañana                                  Eva Gonzalès


miércoles, 3 de octubre de 2012

La España dictatorial de 2012

     Breves apuntes para la Historia de España:
     El 20N de 2011 se celebraron en España unas elecciones democráticas en las que salió por mayoría el Partido Popular (PP): muchos ciudadanos creyeron en sus promesas electorales, otros andaban muy rebotados del partido gobernante anterior (PSOE) y otros, estos una minoría, se frotaban las manos porque conocían algo más que el resto de ciudadanos.
     En el discurso de investidura (19-12-2011), el flamante presidente, Mariano Rajoy, casi al final, a modo de coletilla, dijo algo así como que a España no la reconocería ni su madre a final de 2012. En el texto escrito, esto no está. En efecto, a final de 2012, o casi, a este país no lo reconocemos, salvo los que tenemos ya una cierta edad y con la viva sensación de llevar meses viajando en una maquiavélica máquina del tiempo a velocidad increible: 80, 70, 60, 50...:
     Los derechos laborales se han visto mermados fuertemente por decretos que inciden directamente en el menoscabo o abolición de derechos laborales de los trabajadores (y los funcionarios también son trabajadores) e indirectamente amparan las actitudes fascistas de empresarios, jefes, directivos,...: ni te menees que hay cola esperando tu puesto de trabajo: ¡Qué se jodan!, dijo una señorita públicamente.
     Se reducen los presupuestos destinados a servicios públicos esenciales para la población, como Sanidad, Educación, etc...: ¿prevenir para qué, buena salud y longevidad para qué?, ¿una ciudadanía instruida y capacitada para que tengan claros sus derechos y necesidades y los exigan, ¡anda ya!?, ¿las personas que no pueden valerse?: que las cuiden las mujeres que para eso están, ¿los emigrantes?: aquí sobran los negros, moros y sudacas, que se mueran o vuelvan por donde han venido, ¿qué no te llega el paro, qué te has quedado sin él, qué no llegas a fin de mes?, pues ahorra, que es lo que tienes que hacer...¿Conocen ustedes estos discursos? Yo sí, pero no de ahora, sino de cuando era pequeñita: ha pasado medio siglo.
     Progresiva, sutil y descarada vuelta a las primitivas leyes de orden público: "La calle es mía", profirió Fraga hace décadas: hoy, aquí y ahora, leña a los manifestantes, identificación de titulares de cuentas corrientes que avalaron una iniciativa ciudadana (25S), incriminación legal como golpistas a gente que sólo decía lo que pensaba, solicitud de números de identificación a los grandes de la informática a ver quien dice su palabra por internet,...
      Y los señoritos y señoritas de siempre, vivan donde vivan, pero así les llamo porque soy andaluza, con su pelo engominado, sus chaquetas y corbatas, pendientes de perlas blancas en las orejas ellas, con los bolsillos llenos a reventar, y más y más insaciables, a través de los bancos, grandes empresas y multinacionales, cargos políticos, económicos,... los mismos nombres que llevan presente en la historia de la economía española desde principios del siglo XX: ¿qué no puede pagar su hipoteca?, no haber comprado un piso, vivió usted por encima de sus posibilidades, ¿qué tiene que vivir en algún sitio? y a mí que me cuenta, ¿un préstamo? apáñatelas... Pero dame hasta tu último IRPF, hasta tu último IVA, que necesito tapar los agujeros de mi cloaca. Recuerda que soy católico apostólico romano, ¿o no te has dado cuenta que hasta el momento ni un obispo o cardenal ha dicho ni mu de la pobreza en que se va sumiendo nuestra España?: voto de pobreza, voto de obediencia. Voto de castidad: desgraciada que te quedas preñá, te jodes, y si no estás contenta, te metes una rama de ruda (porque eres una puta, porque esto es lo que te manda Dios), y tú bonita, toma un fajo y a Londres, que tienes gripe y en un par de semanas no te van a ver (y a ver si te andas con cuidado que Pocholín no te va querer como esposa).
     Y así, un día tras otro, a base de la inmovilidad que producen el miedo, la sorpresa y el asombro, la impotencia y la tristeza, nace, se alimenta, crece y se reproduce la dictadura fascista en España, año 2012. 
      Y aún recuerdo lo que me contaba F., una señora analfabeta de 75 años, hablando de los años 40:

"Cuando yo era chica, un día mi padre fue a por leña a casa de un tío mío, pero no se crea que leña de cortar árboles, leña de la que se recogía por el suelo, que él nos la daba para que tuviéramos con que calentarnos. Yo era chiquitilla y me gustaba acompañarlo. Cuando volvíamos un guardia civil lo paró y le preguntó de dónde había sacado la leña, mi padre se lo explicó. Los papeles, le dijo el civil, y mi padre se puso a rebuscarse un papel muy dobladito que siempre llevaba, pero no lo encontró, y el guardia civil le dijo sígame, y yo trotando detrás de mi padre, asustaíta perdida. Nos hizo cruzar el pueblo de punta a punta, por la calle principal, toda la gente mirándonos, y cuando llegamos al cuartelillo le dijo a mi padre, pon ahí la leña y vete. Se quedó con nuestra leña. Cuando pienso en lo que está pasando, me acuerdo de esto que te he contado. Es lo mismo."

        Lo que me dejo en el tintero, por favor, dilo tú en los comentarios, yo estoy hasta el gorro.

viernes, 17 de agosto de 2012

Economía rectal

   -¡Hola, tita! ¿Tita? ¡Tía Blasinaaa!
   -¡Estoy en el trono, hoy ando un poco costosa!
   -¡¿Vas a tardar mucho?!
   -¡No sé si lo que estoy leyendo me ayudará. Escucha: “Me contó que antes trabajaba en blablablá, que estuvo años allí, en el departamento de relojes, pero que hace tres años enfermó, blablablá y perdió el empleo; cuando se recuperó, ya habían buscado a otra persona y no lo readmitieron,...”!
   -¡Es que con las reformas laborales que se han hecho en los últimos años nos están dejando con el culo al aire!
   -¡Paso a otra hoja: “... corrían ominosos rumores sobre la caja de ahorros en la que habían ingresado esa cantidad, blablablá, no solo confirmó las informaciones, blablablá, se ofreció a encontrarles alguna inversión segura que les brindase un tipo de interés más alto que el de la caja de ahorros bajo sospecha.”!
   -¡Esos cabritos, con tal de llenar las arcas...! ¡Son una mafia, todas sospechosas y encima tenemos que sanearlas!
   -¡Termino, de la última hoja: “... en un papel pegado a la parte interior del cristal: 'Se busca dependienta', blablablá, No podemos permitirnos más de treinta dólares al mes, pero el trabajo no es pesado, blablablá, Queremos una muchacha avispada, elegante y de modales corteses. Ya me entiende usted, no mayor de treinta años y guapa.”!
   -¡¿Qué periódico me estás leyendo?!
   -¡Uf, cómo apesta esto...! No es un periódico, Martina, es una novela de Edith Wharton, Las hermanas Bunner, publicada en 1916.
   -Ah...
  -Y escucha esto, como si el mismísimo Gallardón hubiera inspirado a la autora: “Siempre me han atraído las mujeres calladas, las que no montan jaleo ni se dan aires, a las que no les da miedo el trrabajo...”.
-Si retrocedemos un poquito más, me veo monja o con miriñaque.
-O haciendo la revolución francesa, la industrial o la que sea ¡por qué estamos hasta el moño! Dame una cerilla, Martina. No me mires con esa cara, hija, solo es para que se vaya el pestazo...

jueves, 26 de julio de 2012

La mujer que quemaba mandalas



     Una mujer soñó que había cerrado un gran portalón arqueado de madera gruesa, pesada y vieja. Porque le era importante cerrarlo.
     No muy segura de haberlo conseguido lo empujó. No se abrió. Aún no convencida, lo volvió a empujar y éste cedió. Apenas una ranura. La mujer miró. Sólo vio una luz amarilla cobriza. Lo volvió a cerrar y emprendió el camino. Volvió la cabeza atrás. El portalón de madera pesado y viejo seguía cerrado. La mujer se sentía muy cansada.
     Entonces se levantó de la silla. Miró los mandalas que había coloreado. Los miró uno a uno, muy despacio, y supo que tenía que quemarlos.
     Quemó el primero, porque en él había dolor y confusión.
     Quemó el segundo, porque tras la alegría de sus colores se escondía el sufrimiento.
     El tercero ardió rápidamente, era el dolor y el sufrimiento de una niña de cinco años.
     Más rápido ardió el último, el que había coloreado una niña buena.
     Uno quedó sobre la mesa, el de una mujer que no era dolor ni pesar, el de una mujer que no era una niña de cinco años. Había quedado sobre la mesa el mandala de una mujer que los contenía, pero no lo era.
     La mujer ya no se sentía cansada y siguió su camino.


     Muchas mujeres, a lo largo de la historia, han elaborado, tejido, bordado... mandalas, aun sin saberlo. En esos ratos a solas, al lado de un ventanal o a la luz de un candil, hallaban su sosiego, su momento, y mientras sus manos se movían, reflexionaban sobre las dificultades del día, sus sueños vivos o truncados, sobre lo que para ellas era la vida, su vida. Otras veces, reunidas unas cuantas, charlaban animadamente o en largos silencios, intercambiando, más allá de las palabras, retazos de sus vivencias. Quizá, por ello, hemos sido muy inteligentes, porque nos ha habitado la inteligencia de nuestras manos.


  

sábado, 14 de julio de 2012

La calle es nuestra, no te qued/jes en casa

   -¿Qué miras, tía Blasina?
   -A Rajoy, a Merkel, a Fabra, a todos esos sinvergüenzas, mezquinos, codiciosos, prepotentes, políticos, economistas, manipuladores, estafadores que nos están arruinando nuestra tierra.

Finis Gloriae Mundi          Valdés Leal
       -No salen muy favorecidos, más bien putrefactos y llenos de gusanos.
   -Es que es un retrato realista, Martina.
   -Pero ellos están vivos.
   -No por mucho tiempo, se van a morir como todo el mundo y además no saben ni cómo ni cuándo,tan controladores y prepotentes como son.
   -¡¿Y esto, tita?!
   -¡Oh, es una foto del Consejo de Ministros del viernes 13! Mira qué bien han salido Montoro, Rajoy y el rey.
Vampiros vegetarianos            Remedios Varo
   -Sí, tal cual, chupándonos a la gente normal y corriente hasta los tuétanos.
   -Y los Servicios Públicos bien ataditos bajo la mesa que no se les escapen, para sacrificarlos cuando ya nos hayan exprimido del todo.
   -¿Y esta?
Cabeza cortada de San Juan      Valdés Leal

     -Pues lo que me gustaría hacer con todos ellos, hija.
  -Creo que eso lo tienes un poco difícil, tita, son muchos y tú ya no estás para muchos trotes. Te propongo otra cosa.

Foto 15-M Puerta del Sol
      -¡Acepto encantada, Martina!,¡SI NO SALIMOS A LA CALLE NOS VAN A COMER POR SOPAS!,¡YA ESTÁ BIEN DE ABUSONES SINVERGÜENZAS Y MISERABLES!¡LA CALLE ES NUESTRA, COÑO!
   -Tita, para, que hoy no se ha convocado nada aquí.
   -Da lo mismo, Martina, tengo que ir haciendo piernas, ¿me acompañas?
   
  



domingo, 3 de junio de 2012

Pintura e ilustración de nuestras emociones cotidianas: Fini, Carrington, Verefkin, Candela Poó

    El tiempo y la distancia a veces se unen por casualidad. Una ilustradora: Candela Poó, Barcelona, una tienda: Musonka, Leonor Fini: ilustradora.

    Dos mujeres, dos épocas, dos miradas.

Dos caras que nos expresan:





 
"Miedo"  Candela Poó Puerto                     


 "Portrait de femme"  Leonor Fini

El hálito de la vida cuando nos atraviesa:

                                         "Energía"  Candela Poó Puerto





          "Une ombre respirante"
            Leonor Fini


La duplicidad de nuestra existencia:

"Le choix du silence"  Leonor Fini                          
                                                                        "Apertura"  Candela Poó Puerto                                      

                 Rojo silencio, rojo furia:

                                        "Furia"  Candela Poó Puerto
"Portrait de jeune femme"  Leonor Fini

          Con Leonor no comparte aposentos, con Leonora la visión particular de lo habitado:

"La cocina de Villa Aurelia"  Candela Poó Puerto
                 "Carrington's Haul" Leonora Carrington

                                    Las artistas transitan por sus propios espacios y tiempos, por sus propios mundos solitarios, por eso, nada y todo las separa. Nosotros transpiramos el bienestar de su arte.



"Ternura"  Candela Poó Puerto



"Autorretrato de Marianne Von Verefkin"











 A la ilustradora Candela Poó Puerto la puedes encontrar en: Ilustración Viva

miércoles, 23 de mayo de 2012

MANIFESTACIÓN POR LA EDUCACIÓN PÚBLICA ¡OLÉ, OLÉ Y OLÉ!

   -¡Qué manifestación la de ayer, Martina, estoy arrengá!
   -Y que lo digas, tita. ¡Inmensa! Pásame un cojín, que tengo los pies fritos.
   -Toma este, que ya las lumbares me han encajado un poquito.
   -¿Cuántos kilómetros de manifestación anduvimos, tía Blasina?
   -No sé, hija, no me defiendo con el gugle ese para calcularlo.
   -Pues vamos a hacer memoria, a ver si contándolo, alguien nos lo dice. Empecemos. Quedamos en la Plaza de España con la Plataforma por la Escuela Pública, y por la calle San Fernando llegamos hasta Puerta Jerez.
   -Allí nos pusimos a la sombrita.
  -Y nos dimos cuenta que la manifestación de estudiantes universitarios discurría hacia Plaza Nueva.
  -Sí, discurrían, pensaban, reflexionaban...¡y pasaban, pasaban, pasaban!
   -¡Y nosotras media hora ahí mirando alucinadas!
   -Hasta que tomamos la decisión, Martina.
   -Y nos fuimos con ellos.
   -Pero me llamó la Escribana, que iba con su hija y que la marea de ellos ¡había tirado por la Ronda camino del Parlamento! Y rezamos a dios para que nos diera el don de la ubicuidad.
   -Pero como dios no nos respondió, seguimos a nuestra marea de estudiantes hasta Plaza Nueva.
   -Y ya allí ¡pues a las Setas!, que para eso están, para acoger a manifestantes estudiantiles, 15-M, sindicatos... un poco de justicia poética para tanto latrocinio arquitectónico-municipal.
   -Tita... que te pones romántica. Sigamos el discurrir. Sólo nos paramos un momento en Las Setas, porque todo el mundo se había enterado de la gran lengua que recorría la Ronda.
   -Y seguimos, ¡y qué maravilla cuando confluimos! ¡Y qué amable ese muchacho que me subió al techo de aquel coche para que tuviera perspectiva!
   -¡Y el bollo que le dejaste al dueño! Hoy estará que trina.
   -Hija, si es que cada día los fabrican de peor calidad...
   -Y a las once de la noche llegamos al Parlamento, y cantamos el No nos moveran
   -¡Y habíamos salido a las siete de la tarde! Por cierto, Martina, ¿dónde estaban el profesorado y las familias del alumnado del resto de la Escuela Pública? ¿No piensan que sus hijos quieran estudiar una carrera? ¿No les importa que vayan a estar en las clases como sardinas en lata?, ¿que supriman unidades, que desplacen profesorado? ¿Y a estos no les importa que les mengüen el sueldo? ¿No importa a todos que la educación pública es de todos? ¿Qué quieren, que la escuela pública sea como en mis años cincuenta!
   -Mucho me temo, Tía Blasina, que el profesorado y muchas familias de la escuela pública estén aún aquí,escucha,escucha... 
   -Pues como no salgan pronto ¡se los comen los tiburones! ¡¿Pero es que no tienen sangre en las venas, ojos en la cara para ver el futuro de Miseria educativa, económica y ética, que les espera a ellos y las escuelas públicas donde van a trabajar?! ¿O es que se han vuelto tan funcionarios como los que retrata Berlanga? ¿Es que van a dejar tranquilamente que el ministro Meeert y la Consejería se salgan con la suya?
   -Ahora que lo nombras..., mira este titular “El ministro Wert ofrece diálogo franco a los estudiantes”...
   -¡Diálogo Franco!, ¡pero si eso es lo que hacen hasta el momento, que parece que el 20N les dieron la Franquicia! A ver si aprende un poco de Historia de España este ministro de la uve doble ¡qué ya llevamos unas décadas de democracia! ¡Mira que querer recortar en Atención a la Diversidad, con la falta que les hace al ministro y a la Consejera de Educación!

A mi querida Elena J., que no pudo llegar hasta el Parlamento y yo se lo cuento, ¡ah, y abre los tres enlaces, no te olvides!.

domingo, 13 de mayo de 2012

¿EXISTE EL 15M? LA RESPUESTA, AQUÍ, A 12M

   -¡Tía Blasina, qué ojeras tienes! Creo que deberías haberte vuelto un poco antes de Las Setas.
   -Sí, también el kioskero de las chuches me ha preguntado por ellas. Como es tan cotilla, le he dicho que anoche estuve haciendo el amor con el 15M.
   -¡Tita, por dios, lo que hace falta para que cierta gente desacredite es que piensen que en las acampadas se montan orgías!
   -¡Qué va, Martina, se rio mucho! Lo que sí es que me preguntó con mucha sorpresa ¿pero el 15M existe todavía?
   -Y tú no desaprvechaste...
   -Por supuesto, hija. Le dije:
Uno, el 15M existe porque se ve a mucha gente en las manifestaciones.
Dos, el 15M existe porque en los barrios hay Asambleas de Barrio, cosa que también se ve con los ojos, porque en las pancartas firman, por ejemplo Cerro-Amate.
Tres, el 15M existe porque aparece en todos los medios de comunicación, y ya se sabe que todo lo que aparece en los medios de comunicación existe, aunque sea un elefante volador.
Cuatro, el 15M existe porque practica una técnica de existencia muy antigua: "Pienso, luego existo".
Quinto, el 15M existe porque conozco gente de carne y hueso que está en él, no son como los activos financieros.
Sexto, el 15M existe porque si dejara de existir las personas de buena memoria lo habrían resucitado.
Y sétima, el 15M existe porque queremos que exista, ea.
   -¿Y el señor de las chuches?
   -Me ha puesto cara de Rajoy y me ha metido diez pictolines en la bolsita en vez de la docena, y me ha cobrado igual que siempre...  
   
...pero yo, a cambio, le he regalado una fotito de ayer. Esa donde estamos tú, yo y La Escribana Pendolista  al fondo, bajo el gran árbol de la vida.

sábado, 12 de mayo de 2012

15M Cara a Sol vs. Cara al sol 20N

   -¡¿Dónde estás, tita?! ¡¡No te veo!!
   -¡¡Aquí, cara a Sol!!
   -¡¿Pero no estabas aquí, en Las Setas?!... ...¡¡No te escucho, se pierde!!
   -¡¡Estoy aquí, en Las Setas, cara a Sol, ¿o es que crees que no sé orientarme y no sé por dónde cae Madrid!! 
      -Cuelga, tita, te encontré.
   -¡Uy, Martina, qué bien, con tanta gente no creí que te vería!
   -Deja, deja, que mañana los miles de Sevilla, para los amigos serán quinientos.
   -Da lo mismo, hija, los que estamos aquí sabemos que no, lo contaremos a los vecinos, a la cajera del súper, a la familia, al frutero... y los que todavía andan cantando el Cara al sol, que se jodan.
   -Dicen que en Madrid, cuarenta mil.
   -Bueno, el 31 de diciembre nos enteraremos, cuando digan la gente que se comió allí las uvas ¡¡o podemos congelar la imagen de vídeo mañana y contar cabezas!!
   -Estás loca, tita.
   -¡De alegría, Martina, salir a la calle, recuperar la palabra! Ojalá las personas siempre sepamos que tenemos palabra y el derecho a decirla, que toda palabra es importante y que si la perdemos, estamos muy perdidos!
   -Y hablar también es actuar, decir sí, decir no, también es construir. ¡Mira, tía Blasina, ahí está La Escribana Pendolista !
   -¡¡Eh, eh, eh!! ¡Aligera, Martina, que la perdemos, que somos muchos, muchos, muchos! ¡¡Escribana!!
   -¡Blasina! ¡Martina!
   -¡Te has levantado de tus libros!
  -¡Es que aquí también hay palabra, queridas, y muy importante!

    
    

domingo, 6 de mayo de 2012

Impuestos, Rajoy y Guzmán el Bueno

   -¿De qué te sonríes así, tía Blasina? Cuenta, que yo también quiero.
   -Es que he recibido una carta de Ale, mi italianini preferido.
   -Huuuummmm...
  -No, Martina, con él mantengo casta amistad e intercambio postal clásico. Él me cuenta de las sandeces de su país y yo de las burradas del nuestro. ¿Sabes que por allí algunos llaman a Rajoy il signore Forbici?
   -...
   -El señor Tijeras. Te leo:

Hermana Blasa:
Para que veas que nuestros antepasados, por muy bestias que fueran, son, a su vez, precursores de nosotros, que en lo de bestias tampoco nos quedamos cortos, te voy a contar lo que le sucedió a un noble vasallo del Emir de los Benimerines, llamado, como no podía ser de otra forma, Alonso Pérez, o Alonso Pérez de Guzman.
Este caballero había sido enviado por su señor a cobrar los impuestos de unos rifeños nómadas, que llenos de sentido común, no tenían el menor interés en pagar impuestos a un rey cuya utilidad les resultaba un tanto arcana.
Llegó nuestro caballero a los agrestes montes del Rif y allí estaban los sujetos pasivos de los impuestos reales como si tal cosa, haciéndole ver de inmediato al señor don Alonso Pérez que por allí se va a la Meca y por el otro lado a otro sitio, que no es decoroso concretar. Así que marchando…
El Caballero montó en cólera. Desde la propia montura de su alazán, a la vez que emitía un gruñido intraducible, desenvainaba espada, picaba espuelas y su caballo se ponía al galope, seguido de otros diez mil con sus jinetes en postura semejante a la del Caballero.
Hubo un momento de sensatez en los rifeños y, en breves galopadas, se dispersaron por las montañas próximas perseguidos por los cobradores de impuestos…
Al caer la tarde, los rifeños solicitaron tregua y ambas partes se retiraron a parlamentar. Los rifeños debatieron entre ellos el pago y utilidad de sus impuestos, así como la solicitud de aplazamientos. Los guerreros de Alonso Pérez eran partidarios de matar a los rifeños y arramblar con todo lo que pudieran. Pero allí brilló la privilegiada cabeza del Caballero, que se opuso a tal matanza, pues se trataba de seres humanos en activo, considerando que si los mataban, ya no podrían pagar más impuestos, y el Emir de los Creyentes se las iba a ver y desear con los mercados, las primas de riesgo y cosas peores, con el añadido de que al propio Caballero y a su tropa les iba a resultar difícil que la Hacienda del Emir los contratara en el futuro. Los aguerridos recaudadores pensaron, meditaron y hasta comprendieron razonamientos tan alambicados como esos, y miraron con mejores ojos a los morosos fiscales. Estos, a su vez, consideraron razonables las cuentas del fisco y algunos dellos hasta presentaron obsequios personales a los caballeros.
Moraleja: Hasta el obtuso razona cuando se le explica claramente una situación…
Todo lo que te refiero, en mayor detalle, puedes encontrarlo en el “Codice istruttivo a ottuso e sciocchi”, en su Esempio XIV.
Te saludo, mi estimada Blasa:
Alexander Cotta di Malla

   -Habrá que leerlo, tita, aunque traducido, claro.
   -No, hija, la mayoría de la gente no necesitamos leer “Códice instructivo para necios y obtusos”, nos aprovecha más “Hay alternativas” y nuestro propio sentido crítico.


jueves, 3 de mayo de 2012

Economía fascista: prepotencia y despojo

   -Neofascismo, eso es lo que es, fascismo puro y duro, eso sí “lleno de humildad” y “porque no queda más remedio”. Serán... ¡Qué se puede esperar de gente que toda su vida ha pensado que la letra con sangre entra! Pues las reformas también, y si no te gustan, dos platos y como protestes, me saco el cinturón y te arreo. Así, Martina, están las cosas.
   -Y peor también, tita. ¿Recuerdas a Francisca, esa mujer menuda y vivaracha, la suegra de Antoñita, la del bar, que hacía unas tortillas riquísimas?
   -Claro, hija, no me voy a acordar... Pero desde que se jubiló ya no la he vuelto a ver.
   -Pues yo la vi ayer, ha vuelto para ayudar a su nuera. El bar se hunde lentamente, la tostada, media, la ración, media, de desayuno completo a café solo. Su nuera llora por las esquinas porque votó al PP. El cabrón de Rajoy, dice, que nos iba a ayudar a los pequeños empresarios, pero cómo, coño, ¡si está dejando a la gente en la calle y los sueldos por los suelos! Y también me contaba que clientes suyos que nunca han bebido más que un par de cervezas, ahora salen de allí piripis. Dice que ella no es sicóloga ni esas cosas, pero que muy ciego hay que estar para no darse cuenta de lo que está sufriendo mucha gente. Una señora que estaba a mi lado con un café saltó ¡es como si a mi marido le hubieran cortado los cojones de golpe! Todo el día del INEM al sofá y la tele, que ni la mira de lo mustio que está, gracias a dios que no se para en el bar.
   -Martina, y Francisca, ¿cómo está?
   -Tan diligente y lúcida como siempre, con sus 75 muy bien llevados. Ahora va, cuando puede, a un centro de adultos a aprender a leer, pero está muy preocupada, te voy a contar la conversación que tuve con ella:
   -Sabe usted, Martina, con todo esto que está pasando, tengo miedo. No sé a dónde vamos a llegar. Me recuerda cuando yo era chica.
   -Mujer, no va a haber otra guerra civil...
   -No, si no es por eso, es que me acuerdo de la hambruna de la posguerra.
   -No creo que lleguemos a esa hambruna, Francisca...
   -Es que no sé explicarme, le cuento. Cuando yo era chica, un día mi padre fue a por leña a casa de un tío mío, pero no se crea que leña de cortar árboles, leña de la que se recogía por el suelo, que él nos la daba para que tuviéramos con que calentarnos. Yo era chiquitilla y me gustaba acompañarlo. Cuando volvíamos, un guardia civil lo paró y le preguntó de dónde había sacado la leña, mi padre se lo explicó. Los papeles, le dijo el civil, y mi padre se puso a rebuscarse un papel muy dobladito que siempre llevaba, pero no lo encontró, y el guardia civil le dijo sígame, y yo trotando detrás de mi padre, asustaíta perdida. Nos hizo cruzar el pueblo de punta a punta, por la calle principal, toda la gente mirándonos, y cuando llegamos al cuartelillo le dijo a mi padre, pon ahí la leña y vete. Se quedó con nuestra leña. Cuando pienso en lo que está pasando, me acuerdo de esto que te he contado. Es lo mismo.
   -Martina, hija, Francisca no sabrá leer ni escribir las palabras prepotencia y despojo ¡pero qué bien sabe verlas! ¡Si todo el mundo tuviera sus ojos, no nos dejaríamos quitar nuestra leña!

domingo, 22 de abril de 2012

“Grupo 7”, la peli de la prima Merchi

     -Tita, vengo del cine, he visto la película de donde vivía la prima Merchi. ¿Te acuerdas de quién es?
  -¿Merchi? ¿La que se vino del pueblo con su niña chiquita porque el marido la dejó por su mejor amiga y el asunto estaba en boca de todo el mundo?
  -Esa, tía Blasina, que vivía en un sitio muy cutre que hasta daba miedo.
  -Pero eso fue hace un siglo, allá por los 80 lo menos...
  -¿No recuerdas el día que fuimos a verla, que en el patio de vecinos se nos quedó mirando un hombre muy canijo con una pinta medio qué...?
  -¡¿Y que subiendo la escalera un viejo verde que bajaba te miró de arriba abajo como si te desnudara?! Claro, Martina, ya me acuerdo, que aquello parecía más que una casa de vecinos un derribo, con ese zaguán con los buzones abollados y descascarillados, y las paredes con esos desconchones, y el ventanuco de la escalera con el cristal roto lleno de telarañas...
  -¿Y que cuando llegamos al rellano de la prima Merchi, en la puerta de al lado, había un hombre enchaquetado con pinta de ejecutivo cogiendo algo que le daban por la puerta apenas entreabierta?
  -Claro que me acuerdo, Martina, que nos quedamos allí plantadas, porque la puerta de tu prima estaba tan pegada a la otra que tuvimos que esperar a que el enchaquetado huyera, ¡y la cara de susto que puso!
   -Y de mala leche, tita, que le preguntamos a la prima de qué iba aquello.
   -Sí, hija, sí, no me voy a acordar, que estaba yo abriendo los pastelitos en la mesa camilla de aquel cuadrado al que tu prima llamaba salita, con su niña pendiente de su bollo de leche y oigo un griterío en el patio de vecinos y cuando me asomo, veo a ese hombre escuálido como una calavera corriendo y a esa mujer detrás de él, blandiendo un cuchillo jamonero y gritando “¡Te voy a matá, hijo puta!” y tras ella otro hombre, estoque de torero en ristre, “¡Déjamelo a mí!”. Como para olvidarlo, Martina, que se me acogotó la risa con el miedo.
   -Pues eso no es todo, tita, en la película también sale el garito que había en los bajos de donde vivía Marcela cuando se vino a estudiar aquí. Tú no la conoces, pero la primera vez que fui a su casa, ya de noche, casi me parto de la risa porque de ese bar, que tenía una puerta entreabierta muy pequeña y de donde apenas salía luz, sí salía a todo volumen ¡música de Semana Santa, y era otoño! Marcela me dijo que era un sitio muy raro, que le daba repelús porque nunca veía salir ni entrar a nadie, ni se veía adentro más allá de una franja de decoración rojiza y abigarrada de cristos y vírgenes. ¡Y por la película me entero de que allí se vendía cocaína a gente de postín!
   -Martina, hija, esa película es una mina de sabiduría. ¿Cómo me dijiste que se llama?
   -“Grupo 7”, tita, no te la pierdas, si quieres voy contigo, y llamo a Merchi y Marcela, por si no la han visto, que se vengan y rememoren viejos tiempos.
   -Bueno, bueno, eso de viejos está por ver, que como nos están poniendo las cosas, esa miseria, que nunca se ha ido, va a parir mucha desgracia.

martes, 3 de abril de 2012

Pintoras surrealistas y pintoras expresionistas

   -¡Caguntó! Que no hay manera, ¿será posible?
   -Serénate, tita, que te van a salir las teclas por debajo de la mesa y el intro por el supermercado.
   -¡Pero tú te crees, Martina, que meto en el gugle una cosa y no me la busca y además me la cambia! Quizás quisiste decir "pintoras surrealistas y pintoras impresionistas", quizás quisiste decir... ¡pues no señor, no quise decir, digo "pintoras surrealistas y pintoras expresionistas" y punto!
   -A ver, tía Blasina... "Pintoras surrealistas y pintoras expresionistas"... Anda, pues es verdad...
   -Y ahora mete "pintoras expresionistas" solamente, verás como a la segunda o tercera página en vez de pintoras expresionistas te sale pintura expresionista.
   -... Cierto... Creo que pintoras expresionistas que hayan trascendido hay pocas...
   -¡Y qué!, ¿es que no tienen derecho a la vida internáutica?, ¿es que no hay nadie a lo largo y ancho del mundo que las haya estudiado junto a las pintoras surrealistas?... ¡Bah! y una que soñaba que la red era libre...
   -No tita, su mismo nombre lo dice: red.
   -Ya... y estas, juntas, no han caído.

"Rote Stadt"   Marianne Von Werwfkin
  

domingo, 1 de abril de 2012

Pintoras surrealistas y cielos grises

   A veces, en primavera, los cielos se tornan grises, lloran, y el suelo se embarra. Una opta por quedarse en casa, parapetada tras los cristales del balcón y llover un poco, aunque solo sea por dentro -siempre es chocante que se mojen las teclas del ordenador-. Y haraganear tristona por el sofá hojeando el libro que lleva un mes leyendo, ojeando en la tele los colorines de una serie que ni ve ni le interesa, quizá huroneando por su pantalla sideral portátil... hasta que recuerda un día en que al fondo de su madriguera internáutica encontró a las pintoras surrealistas: a Carrington, a Remedios Varo, a Leonor Fini y Maruja Mallo, algo de sí misma y algo prestado. Así que penas de nubes agrisadas se agrietan y un rayito azul celeste se cuela entre ellas.
    Pintoras surrealistas. Intro.

"Tránsito en espiral"  Remedios Varo

   Así transita alguien en las tardes húmedas de su interior, secando las aguas amargas, llegando a su centro, descubriendo que no se secó.


"Arca de Noé"  Leonora Carrington

   Y como animal bíblico sube a su propia arca, desparejada del mundo, a solas en su espiral. Y el arca a rebosar de esos animafantasmas desemparejados que pululan entre sus maderas agrietando su piel, ella-arca, y desea...

"Dos máscaras"  Maruja Mallo

   ...que dos sea uno, emparejar seco-húmedo y hacer claridad sonriente, dejar la espiral sumida en caracol, ahí, en medio, ahí...


"Heliodora"  Leonor Fini

  ...y pernoctar entre flores, para amanecer naturaleza viva, ...


"Naturaleza viva"  Maruja Mallo

             ...torbellino de vida, viento arremolinado de luces...

"Naturaleza muerta resucitando"  Remedios Varo

                       ...que funda sus alas en el fuego vital.

"Dithyrambe"  Leonor Fini