jueves, 26 de julio de 2012

La mujer que quemaba mandalas



     Una mujer soñó que había cerrado un gran portalón arqueado de madera gruesa, pesada y vieja. Porque le era importante cerrarlo.
     No muy segura de haberlo conseguido lo empujó. No se abrió. Aún no convencida, lo volvió a empujar y éste cedió. Apenas una ranura. La mujer miró. Sólo vio una luz amarilla cobriza. Lo volvió a cerrar y emprendió el camino. Volvió la cabeza atrás. El portalón de madera pesado y viejo seguía cerrado. La mujer se sentía muy cansada.
     Entonces se levantó de la silla. Miró los mandalas que había coloreado. Los miró uno a uno, muy despacio, y supo que tenía que quemarlos.
     Quemó el primero, porque en él había dolor y confusión.
     Quemó el segundo, porque tras la alegría de sus colores se escondía el sufrimiento.
     El tercero ardió rápidamente, era el dolor y el sufrimiento de una niña de cinco años.
     Más rápido ardió el último, el que había coloreado una niña buena.
     Uno quedó sobre la mesa, el de una mujer que no era dolor ni pesar, el de una mujer que no era una niña de cinco años. Había quedado sobre la mesa el mandala de una mujer que los contenía, pero no lo era.
     La mujer ya no se sentía cansada y siguió su camino.


     Muchas mujeres, a lo largo de la historia, han elaborado, tejido, bordado... mandalas, aun sin saberlo. En esos ratos a solas, al lado de un ventanal o a la luz de un candil, hallaban su sosiego, su momento, y mientras sus manos se movían, reflexionaban sobre las dificultades del día, sus sueños vivos o truncados, sobre lo que para ellas era la vida, su vida. Otras veces, reunidas unas cuantas, charlaban animadamente o en largos silencios, intercambiando, más allá de las palabras, retazos de sus vivencias. Quizá, por ello, hemos sido muy inteligentes, porque nos ha habitado la inteligencia de nuestras manos.


  

sábado, 14 de julio de 2012

La calle es nuestra, no te qued/jes en casa

   -¿Qué miras, tía Blasina?
   -A Rajoy, a Merkel, a Fabra, a todos esos sinvergüenzas, mezquinos, codiciosos, prepotentes, políticos, economistas, manipuladores, estafadores que nos están arruinando nuestra tierra.

Finis Gloriae Mundi          Valdés Leal
       -No salen muy favorecidos, más bien putrefactos y llenos de gusanos.
   -Es que es un retrato realista, Martina.
   -Pero ellos están vivos.
   -No por mucho tiempo, se van a morir como todo el mundo y además no saben ni cómo ni cuándo,tan controladores y prepotentes como son.
   -¡¿Y esto, tita?!
   -¡Oh, es una foto del Consejo de Ministros del viernes 13! Mira qué bien han salido Montoro, Rajoy y el rey.
Vampiros vegetarianos            Remedios Varo
   -Sí, tal cual, chupándonos a la gente normal y corriente hasta los tuétanos.
   -Y los Servicios Públicos bien ataditos bajo la mesa que no se les escapen, para sacrificarlos cuando ya nos hayan exprimido del todo.
   -¿Y esta?
Cabeza cortada de San Juan      Valdés Leal

     -Pues lo que me gustaría hacer con todos ellos, hija.
  -Creo que eso lo tienes un poco difícil, tita, son muchos y tú ya no estás para muchos trotes. Te propongo otra cosa.

Foto 15-M Puerta del Sol
      -¡Acepto encantada, Martina!,¡SI NO SALIMOS A LA CALLE NOS VAN A COMER POR SOPAS!,¡YA ESTÁ BIEN DE ABUSONES SINVERGÜENZAS Y MISERABLES!¡LA CALLE ES NUESTRA, COÑO!
   -Tita, para, que hoy no se ha convocado nada aquí.
   -Da lo mismo, Martina, tengo que ir haciendo piernas, ¿me acompañas?